Normalmente todos tenemos una estación del año favorita y otra no tan favorita, y esto suele condicionar la elección de la fecha la boda.
No considero que haya una estación buena o mala para casarse, cada una tiene un toque diferente, una luz, unos colores, unas flores y sus ventajas e inconvenientes.
Aunque podríamos, no queremos extendernos demasiado, ya que son detalles muy fáciles de ver y prometemos hacer un post más extenso para cada estación.
BODA DE PRIMAVERA
La primavera nos aporta temperaturas normalmente suaves, pero también puede ser inestable, con tormentas y días de intenso calor.
La primavera es muy adecuada para hacer bodas de mañana y con ceremonia al aire libre.
Ideal si quieres una boda colorida y en tonos suaves.
Cuidado con las alergias, hay plantas que pueden estar en plena floración y si hay mucha concentración en el lugar de la boda habrá invitados que no puedan ir o incluso enfermar.
Tendrás muchísimas flores de temporada a la hora de elegir tu ramo y la decoración en general.
Los destinos turísticos no están masificados, no son muy caros y hará una temperatura para disfrutar de playa, montaña o ciudad cómodamente.
BODA DE VERANO
Las altas temperaturas nos recomiendan celebrar boda de noche y al aire libre, donde acabar viendo amanecer con los pies dentro de la piscina.
Es la época ideal para usar colores llamativos en la decoración de tu boda.
Aunque habrá menos variedad floral que en primavera, no tendrás problema para elegir bonitas flores de temporada.
Los destinos turísticos están mucho más masificados, son bastante más caros y puede hacer demasiado calor para según qué destinos.
BODA DE OTOÑO
Con temperaturas similares a la primavera la luz del otoño es una luz muy especial.
Los paisajes nos aportan calidez con sus rojos y marrones, siendo los colores ideales para usar en la decoración.
Esta estación nos trae otras variedades de flores muy diferentes y que pueden aportar gran originalidad a tu ramo y decoración.
Es un tiempo ideal para hacer turismo de ciudad, al no tener temperaturas extremas ni ser temporada alta es un momento ideal para visitar museos y conocer grandes ciudades.
BODA DE INVIERNO
Al predominar el mal tiempo y las temperaturas bajas en este época no suele ser habitual elegirla para casarse. Aunque cada vez más novios están dejando atrás ese cliché y eligiendo fechas invernales.
Al tener menos horas de luz es la época ideal para celebrar una boda de día, lo que también hace que las temperaturas a soportar sean más suaves.
El inviernos nos trae unas flores preciosas, delicadas y con el predominio del color blanco.
Es el momento ideal para viajar al hemisferio sur donde es verano y volver a casa con un moreno envidiable.
0 comentarios